ANTECEDENTES FAMILIARES DEL GENERAL DON MARTÍN GÜEMES
Por Sergio Núñez y Ruiz-Díaz Antigua familia de Cantabria, cuya casa solar se ubicó en el lugar de su nombre, que tomó como apellido, Ayuntamiento de Bareyo, Partido Judicial de Santoña (Santander). Sus miembros probaron su nobleza diversas veces en las Órdenes Militares como Santiago, Calatrava y Carlos III. De sus miembros peninsulares se destacaron: Juan Francisco Güemes y Horcasitas, (Reinosa, Cantabria, España. 1681 - † Madrid, España. Año de 1766). Habiéndose desempeñado como Capitán General de Cuba de 1734 a 1756, por sus servicios fue creado Conde de Revilla Gigedo en 1749 por S.M. Don Felipe V. Se destacó en dicho gobierno por crear la Compañía de Comercio de la Habana (1738-1740). Al terminar su mandato como Capitán General de Cuba fue nombrado 41º Virrey de Nueva España (México) por el período 1746-1756. El 1º Conde de Revilla Gigedo se ganó la buena reputación de un gobernante eficiente y honorable. Tomó medidas para que los empleados del gobierno cumplieran con sus cargos. Aumentó los réditos del gobierno, aumentando el tamaño de flota de protección mercante en la ruta naval de Veracruz y de La Habana. Con la expansión del comercio y el final de la piratería después del fin de la guerra contra Inglaterra en 1748 (a los que había expulsado de Cuba y Florida durante la Guerra de Sucesión Austríaca), se volvió a incrementar la producción de plata en la colonia. Reorganizó también la administración y gerencia de los documentos oficiales; y solicitó que los asuntos de índole civil y religioso fueran consideradas cada una independiente de la otra. La primera reforma es considerada como parte de la fundación del actual Archivo General de la Nación. Después de entregar el gobierno a su sucesor, Agustín de Ahumada y Villalón, II Marqués de las Amarillas, Güemes volvió a España, en donde le dieron el mando de Capitán General del Ejército. Propuesto Virrey del Nueva Granada y de Navarra; llegó a ser Presidente del Consejo de Castilla y Presidente del Consejo de la Guerra. Su hijo, Juan Vicente de Güemes Pacheco de Padilla y Horcasitas nació en La Habana, Cuba en 1740 y murió en Madrid, en 1799, segundo conde de Revillagigedo, también ocupó el alto sitial de su padre al ser nombrado 51º Virrey de Nueva España en 1789 y hasta 1794. Estimuló el establecimiento de las Intendencias y reorganizó los tribunales. Promovió el cultivo de plantas textiles (cáñamo, lino y algodón), reglamentó la explotación de maderas e impulsó las comunicaciones, construyendo una red de caminos entre los puertos de Veracruz, Acapulco y Mazatlán, y las ciudades de México y Toluca. Estableció el correo bimestral entre las capitales de las intendencias. Creó numerosas escuelas para indígenas y apoyó los estudios profesionales, sobre todo los de la Academia de San Carlos. Durante su administración, arribó la expedición de Martín Sessé, discípulo del naturalista Carl von Linneo, encargado de recopilar la flora mexicana (y redactor de la obra del mismo título), a quien apoyó en la realización de sus trabajos. En 1790, ordenó que se excavara la plaza de armas, donde se encontró el denominado Calendario azteca. Inauguró el Museo de Historia Natural en 1793. Creó las cátedras de Botánica, Anatomía y Fisiología, y fundó el Archivo General. Preocupado por la validación pública de su administración, instaló un buzón para recoger comentarios y quejas de sus gobernados. Al fin de su gestión, el Ayuntamiento de México presentó acusaciones en su contra ante el Consejo de Indias, que le siguió un juicio de residencia. Fue absuelto al encontrársele inocente. Falleció en Madrid en 1799, siendo considerado uno de los mejores Virreyes del período de la Ilustración. El hijo de éste último, Don Antonio de Güemes y Pacheco de Padilla, Teniente General de los Reales Ejércitos, Caballero de Santiago y de Carlos III, fue titulado con la Grandeza de España sobre su título de Conde de Revilla Gigedo, como Conde de Güemes por Don Carlos IV en 1781. Por su parte, nuestro biografiado era hijo de Don Gabriel de Güemes Montero y de la Bárcena Campero, santanderino, natural de Abionzo (nacido en 1748), quien en 1777 fuera nombrado Tesorero de las Reales Cajas de Jujuy, haciéndose cargo en 1778. El mismo año de su arribo casó con Doña Magdalena Goyechea y de la Corte, hija del Maestre de Campo, don Martín Miguel de Goyechea, Teniente de Gobernador de Jujuy, descendiente del Conquistador Don Francisco de Argañaraz y Murguía, y de Dª María Ignacia de la Corte y Palacios, de antigua familia jujeña. El matrimonio tuvo nueve hijos: Juan Manuel, Martín Miguel, Gabriel José, Magdalena, Francisca, José Francisco, Benjamín, Isaac y Napoleón. Sólo el primero, Juan Manuel, nació en Jujuy; los otros lo hicieron en Salta. El padre de Don Martín Miguel de Güemes murió en Salta en noviembre de 1807, a los 59 años de edad. Doña Magdalena casó en segundas nupcias con el Sargento Mayor José Francisco de Tineo Escobar Castellanos, hijo del que había sido Gobernador del Tucumán y Presidente de la Real Audiencia de Charcas. Este casamiento se realiza en 1809, dos años después de la muerte del primer marido. Este matrimonio tuvo un hijo, Cupertino, que murió de niño. Cuando Don Gabriel de Güemes Montero y doña Magdalena se casaron, él según consta en su testamento, sólo aportó al matrimonio "la precisa decencia de su persona" y doña Magdalena, cuantiosos bienes que pasaremos a detallar. Al hacer doña Magdalena testamento, (muere casi centenaria en 1853) aclara tener una deuda de gratitud con su hijo Napoleón, quien durante 18 años la alimentó a su costa, la acompañó en sus amargas soledades, en el infortunio de su larga y penosa vida, por cuyo motivo lo mejoraba con el tercio de sus bienes. Sus bienes principales eran las estancias del Bordo y del Paraíso. También fue dueña de la estancia del Palmar. La casa era la de la escuela Güemes. En lo que respecta a las relaciones de Martín Miguel y su madre, se ha dicho que éste era un excelente hijo, y esto se traduce en el respetuoso amor y consideración que tenía para con su progenitora. No daba comienzo baile alguno de gala, en el cual Güemes no sacara a bailar a su madre el primer minuet de la fiesta.
Sus hermanos:
● Juan Manuel de Güemes, Hermano mayor de Martín Miguel, Jurisconsulto, nació en Salta el 15 de febrero de 1778, murió en la ciudad natal el 6 de febrero de 1831. Después de cursar estudios preparatorios en el colegio Monserrat, de Córdoba, se graduó en ambos derechos en Chuquisaca (1808). De vuelta a Salta, se dedico a la propaganda revolucionaria con Moldes, Gorriti, Gurruchaga, etc. Contribuyó con sus bienes a equipar al ejército del norte en 1810 y en 1811 fue miembro del cabildo de Salta, sostuvo la política del Monteagudo. Colaboró con su hermano, el Gobernador Güemes y fue cabildante nuevamente; habiendo sido elegido senador en 1819. En 1826 presentó a la legislatura salteña un amplio informe sobre los derechos a la posesión de Tarija por parte de Salta. Fue Teniente gobernador de Jujuy en 1827 y en 1828 volvió a ser miembro de la Sala de representantes de Salta. También integró la Cámara Judicial. Había casado con Da. Bernardina Martínez de Iriarte Medina, de conocidas familias salteñas. ● Magdalena (Macacha) Güemes de Tejada. Hermana del general Martín Miguel de Güemes, de cuya acción en pro de la independencia fue eficaz colaboradora. Nació en Salta el 11 de diciembre de 1787. Recibió la educación habitual para las mujeres de su época y oposición, pero poseía cualidades propias que le permitieron descollar en un medio rico en mujeres de personalidad. El 24 de octubre de 1803 se casó con Dn. Román Tejada Fernández, perteneciente a una antigua familia de Salta. Su acción poco después de la Revolución de Mayo, cuando convirtió su casa en taller para confeccionar ropa para los soldados de la partida de observación organizada por su hermano. A partir de entonces fue su más entusiasta colaboradora, y supo sacar partido de su inteligencia y su posición para desempeñar tareas arriesgadas, especialmente cuando los realistas ocupaban la ciudad de Salta y Güemes los combatía por todos los medios. Dotada de habilidad política, la puso al servicio de su hermano en los momentos difíciles, como en 1815, cuando gracias a sus gestiones se llegó a la paz de los Cerrillos, luego de la delicada situación surgida entre Güemes y las fuerzas de Buenos Aires al mando del general Rondeau. Güemes se encontraba con ella cuando una partida realista lo atacó e hirió, en Salta, el 7 de junio de 1821, causándole la muerte en pocos días después. Macacha continuó participando en los sucesos políticos de la provincia, con la audacia que la caracterizaba. Fue muy querida por el pueblo debido a la generosidad con que ayudaba a los necesitados. Falleció en Salta el 7 de junio de 1866. ● De su matrimonio con Don Román Tejada Fernández, hubo una sola hija, Eulogia, quien casó con Pío José Tedín Castro Zavala, siendo su hijo Virgilio Maria Tedín Tejada, quien al casar con Da. María Uriburu Arenales, de distinguidas familias salteñas tanto por su padre (descendiente de la Casa Infanzona de su apellido) como por su madre, hija del General Juan Antonio Álvarez de Arenales. Éste, gobernador de Salta Gobernador de Salta desde 1823 procuro establecer un gobierno liberal como el de Rivadavia en Buenos Aires. De este matrimonio fue descendiente el conocido juez de la Nación Don Virgilio Tedín Uriburu, con dilatada descendencia en la actualidad. ● Cnel. José de Güemes. Nació en Salta en 1803, hermano menor del General Martín Miguel de Güemes, intervino desde muy niño en la guerra de la Independencia, lucho junto a su hermano, Belgrano y Pueyrredón hasta la finalización de la misma. Acompañó al que fuera Gobernador de Salta José Ignacio de Gorriti en su exilio, en 1830 cuando invadió con las fuerzas de Salta las Provincias de la Rioja y Catamarca. En 1831 se levantó en armas en los distritos, del valle de Jujuy, desconociendo la autoridad del Gobernador Rudecindo Alvarado. Ejerció la Gobernación de Salta desde el 6 de diciembre de 1831 al 8 de febrero de 1832, después del triunfo de Quiroga contra La Madrid en la Ciudadela; fue su ministro Amancio Alcorta. Fue derrotado en Los Cerrillos el 8 de febrero de 1832 por fuerzas comandadas por el Cnel. Pablo de la Torre. Emigró un tiempo a Bolivia, regresando luego a Salta donde falleció el 13 de diciembre de 1840. Del mismo no se tiene descendencia conocida. Descendientes directos: ● Del matrimonio de Don Martín Miguel de Güemes con Da. María del Carmen Puch de la Vega Velarde (por parte de madre emparentada con la misma familia de su cónyuge, por los de la Corte), celebrado en Salta en el año 1815. De los tres hijos sólo dos sobrevivieron al matrimonio: Martín y Luis, nacido el 21 de junio de 1819. Ignacio, nacido en Julio de 1820, falleció antes de cumplir el año. Martín María falleció en Salta el 26 de diciembre de 1862, a los 45 años.
El primogénito:
● Martín María del Milagro Güemes , nacido en salta en el 8 de setiembre de 1817. Martín María tenía 3 años cuando perdió a su padre (en junio de 1821) y 4 cuando falleció su madre (abril de 1822). Valentín Delgadillo recordaba años después que "Güemes murió pobre y dejando a sus hijos en mendicidad y a los que, para alimentarlos, fue necesario que el abuelo recurra al Gobierno varias veces, pidiendo una ración de hambre". Casó con su prima hermana Adela Güemes Nadal, hija de su tío Napoléon Güemes Goyechea y de Da. Benedicta Nadal Morel. El matrimonio se efectuó el 20 de diciembre de 1856. Fue dos veces gobernador de la Provincia. En su gestión se concluyó la realización del Censo Nacional comenzado en 1855, se dictó la Ley de Dominio Privado de Montes exceptuándose de minas por ser propiedad del Estado y la Ley reglamentando el pastoreo de ganado. Se destinaron fondos para la construcción de la Catedral iniciada en 1856. Se estableció por ley la creación del Colegio de Educación Pública para varones. Falleció en Salta en 1860 por causas cardíacas. Su hijo: ● Martín Gabriel de Güemes Gobernador de Salta 1886–1889. Nieto del héroe gaucho, fue un gobierno agitado puesto que tuvo que afrontar la epidemia de cólera. Durante su gestión se fundó Se fundó el Banco Provincial de Salta y el Registro Civil. El Poder Ejecutivo quedó autorizado a vender el terreno y el edificio del Cabildo – dichos fondos fueron destinados a la construcción de oficinas públicas para la provincia. Se dispuso la construcción del asilo “Buen Pastor”.
● El hijo menor de nuestro biografiado, Don Luis, de su matrimonio en 1850 con Da. Rosaura Castro Sansetenea tuvo por hijos a: Domingo, Carmen, Martín Miguel, Luis, Francisca, Rosaura, Hortensia, Julio y Adolfo. Hay que destacar que la mayoría de ellos casaron con señoritas de antiguas familias porteñas. De los mismos se destacaron:
● Dr. Domingo Güemes Castro, quien nació en Salta en 1854, fue el hijo mayor de Luis Güemes Puch, habiendo nacido en Salta en 1854.En Buenos Aires se graduó de doctor en leyes. El general Dionisio Puch, cuñado del general Güemes, consiguió entre 1870 y 1871, le remitieran desde Salta gran parte de la documentación del héroe, para componer y publicar una biografía. En 1872 desistió de este propósito y encomendó a su sobrino nieto que recogiera la documentación que estaba en poder del doctor Dalmacio Vélez Sársfield. Regresó a Salta donde fue legislador provincial, intendente de la capital y ministro de gobierno. En 1883 fue elegido diputado nacional. Hallándose entre los fundadores de la Unión Cívica junto a los doctores Outes, Ortiz y Latorre. Debido a los hechos de 1893, debió huir del país, refugiándose en Montevideo- Persona de enorme cultura y destacado abogado, el Dr. Güemes dedicó sus últimos años a organizar su enorme e importante archivo sobre la vida y acción de su abuelo, el General Martín Miguel de Güemes. Casó con da. Francisca Torino Solá, de distinguida familia salteña, con descendencia en la actualidad. Murió en la ciudad de Buenos Aires el 2 de noviembre de 1923.
● Dr. Luis Güemes Castro, nació en la ciudad de Salta el 6 de febrero de 1856. Cursó sus estudios secundarios en el Colegio Nacional de su ciudad natal. En 1873 se inscribió en la Facultad de Medicina de Buenos Aires para terminar sus estudios en 1879. Su tesis versó sobre Medicina Moral, la que se ocupa de la necesidad del médico de "conocer al hombre entero, en su doble esencia física y moral", es decir psíquica y anímica. Hacia 1880, partió hacia Europa, inscribiéndose como simple estudiante en la Facultad de Medicina para cursar, paso a paso, la Carrera a nivel elevado que podía cursarse allí en ese momento. Terminado por segunda vez el curso escribió su tesis de graduado sobre Hematosalpine. Regresa al país en el año 1889 precedido por un buen logrado renombre, ocupando en 1897 la cátedra de Clínica Médica a la cual consagraría su talento, su sexto sentido clínico, la sabiduría, la bondad y el señorío que conformaban su personalidad. En 1895, fue designado Académico de Medicina en el sitial Nº 6, continuando en el mismo hasta el día de su muerte. Al incorporarse leyó su discurso, que tituló Exactitud en Medicina. En 1907 sus comprovincianos lo eligieron para una banca en el Senado de la Nación. Fue Vice-Presidente del Alto Cuerpo varios años y alguna vez también Presidente. En 1912 fue Consejero de la Facultad de Medicina y su actuación fue de armonía, justicia, progreso y de creación de nuevos Institutos que contribuyeron al progreso de la Escuela. Clásico ha quedado, en los principios hipocráticos, su discurso de incorporación a la Academia cuando expresó su juicio sobre: la Medicina es una ciencia difícil, un arte delicado, un humilde oficio, una noble misión. En 1921 el profesor Güemes se retiró de la Cátedra, falleciendo en diciembre de 1927. Un Monumento sobre la pared de la calle Córdoba de la antigua Facultad de Medicina perpetúa su Memoria. Fue descubierto con extraordinaria pompa el 7 de diciembre de 1935 (Obra del escultor Agustín Riganelli). Había contraído matrimonio con da. Marta Ramos Mexía Lavalle, de conocida familia porteña, y sobrina nieta materna del Gral. Unitario Juan Galo de Lavalle. Con descendencia en la actualidad.
● El menor de los hijos del matrimonio Güemes Castro, Adolfo, Nació en Salta el 10 de septiembre de 1873. También en Salta realizó sus estudios primarios y secundarios, egresando como bachiller del Colegio Nacional. Posteriormente se trasladó a Buenos Aires a estudiar medicina. Allí se doctoró en 1898, con la tesis “Contribución al estudio de la policerosis tuberculosa”Quiso perfeccionarse, conocer más. Con su diploma recién obtenido viajó a Europa. En París logra otro doctorado. Regresado al país en 1904 se aboca de pleno a la profesión, incorporándose al Hospital Rivadavia en donde ejerció con mucho prestigio durante muchos años. Sin embargo, la política lo atraía muy fuertemente, seguramente porque a los propios genes se sumaban los acontecimientos del país, y en especial los de su provincia natal. Como era un verdadero ciudadano respetuoso de la Constitución y de las leyes, demócrata, enemigo de las prebendas y de los acomodos, defensor de la libertad y de la igualdad de oportunidades, valores estos que por tradición de sus mayores formaban parte de su personalidad, se había incorporado a las filas políticas que, por ese entonces para él, más se ajustaban a sus ideales: la Unión Cívica Radical. Vuelve a Salta. Colabora intensamente con sus correligionarios en el gobierno provincial. Más tarde es elegido Gobernador de la Provincia, cumpliendo su mandato desde el 1º de mayo de 1922 hasta la misma fecha de 1925. Se llevaron a cabo en educación y en salud pública especialmente, de manera de rigurosa economía, de responsable desempeño en la administración, de eficiencia y ejecutividad en los actos y por el estilo de sencillez, austeridad y dedicación al trabajo que él imponía en todos los estamentos. Ocurría que él era el ejemplo. La revolución del 6 de septiembre de 1930 coloca al Dr. Adolfo Güemes en la vereda del frente de la ruptura del sistema constitucional. El gobierno de facto había resuelto llamar a elecciones presidenciales. A modo de prueba se realizan solamente en la provincia de Buenos Aires, donde en abril de 1931, los radicales ganan las elecciones para gobernador. Ante esa situación, el gobierno de José Félix Uriburu decide desconocer el resultado y anularlas. Así y todo, la Convención Nacional del Radicalismo proclama una fórmula para los comicios presidenciales de noviembre: la integraban el ex presidente Marcelo T. de Alvear y el ex gobernador de Salta, Adolfo Güemes. El gobierno de Uriburu veta a los dos integrantes de la fórmula: a Alvear, argumentando que no se había cumplido aún el plazo de seis años para que volviera a aspirar a la presidencia - curioso prurito constitucional en un gobierno de facto; a Güemes, por su reconocida militancia irigoyenista que lo hacía un representante del régimen depuesto. Con sus candidatos proscriptos, la Unión Cívica Radical, entonces, decidió abstenerse. Como consecuencia de la lucha política sobreviene la persecución, y en 1933 el Dr. Adolfo Güemes es apresado; junto con él parten confinados a prisión en Ushuaia los dirigentes radicales Ricardo Rojas, Enrique Mosca, Federico Álvarez de Toledo, Mario Guido, Honorio Pueyrredón y José Luis Cantilo, entre otros. También le acompaña su fiel servidor, Pepe Casanz, quien simuló ser otro conspicuo dirigente para no ser separado de su querido patrón. Al año siguiente, de regreso de su confinamiento, ocupa la presidencia del Comité Nacional de su partido: “... La Sociología, que busca en los acontecimientos de la historia las leyes que rigen la vida de la humanidad, enseña que solo hay progreso real y positivo en aquellos países en que, la gran mayoría de sus habitantes lleva arraigada en la conciencia la verdadera cultura cívica, que consiste, precisamente, en el acatamiento de los dictados de la ley. (...) desde la tribu salvaje a la compleja estructura de la sociedad moderna exigen comando y obediencia; (...) no basta poseer energías; para triunfar se requiere que la inteligencia, la voluntad las pongan en juego armoniosamente, facultad directriz que se obtiene y perfecciona por el ejercicio. Se llama entrenamiento en el deporte, técnica en el arte y en la ciencia..” Tal fue el pensamiento político del Dr. Adolfo Güemes. Queriendo retribuir de alguna manera a la confianza y a la estima que la sociedad le había brindado, hizo donación de la histórica Chacra “El Carmen de Güemes” que había pertenecido a su abuelo el General Güemes, de alrededor de 300 hectáreas, a la Nación, con cargo de ser destinada a Escuela Granja. Su estructura edilicia fue realizada por el Ministerio de Obras Públicas de la Nación y entregado al Ministerio de Agricultura y Granja de la Nación el 17 de mayo de 1952, año en que comienza a funcionar en el mes de Abril el primer ciclo lectivo. En 1945 hizo donación al Museo Colonial, Histórico y de Bellas Artes de varias obras artísticas de su propiedad. El 4 de Octubre de 1947 muere en Buenos Aires, sin descendencia.
Conclusión:
La familia del Gobernador y Brigadier General don Martín Miguel, de Güemes se encuentra representada en la actualidad por las familias: Güemes Usandivaras, Güemes Ayerza, Güemes Torino y Güemes Bengolea.